domingo, junio 16

En pocas palabras . . .


Solo recurro a las palabras cuando la vida me golpea o cuando me saca una sonrisa. El resto del tiempo me olvido de ellas, y no permito que salgan a vivir. A pesar de eso, siguen siendo leales y hacen que pueda expresarme sin esfuerzos, con total certeza.
Y cuando los días pierden su sabor y las noches atacan para hacerme llorar, es cuando recuerdo que las tengo a ellas para desahogar mis penas. Cuando la persona mas importante para mi me abandona y las demás son incapaces de escucharme, son ellas las que me acompañan y me sacan de la soledad.
Cuando la vida no sabe con que mas atacar, ellas me hacen ver lo fuerte que puedo llegar a ser, especialmente cuando todo alrededor estalla.