viernes, marzo 2


El amor es paciente y amable, nunca es celoso.  El amor nunca es jactancioso ni engreído, nunca es grosero ni egoísta. No se ofende y no es resentido, el amor no se hace ningún placer en los pecados de los demás sino que se deleita en la verdad. Siempre está dispuesto a escuchar, confiar, esperar y soportar lo que venga.